
Este fin de semana fue intenso porque, además del culto unido y nuestras reuniones habituales, decidimos hacer un bautismo ya que una docena de personas lo estaban pidiendo y eso no se puede postergar, así que haciendo caso omiso de las bajas temperaturas, partimos al mar el domingo a mediodía y tuvimos un funeral espiritual y su respectivo parto, donde once lindos recién nacidos vinieron a ser parte de la iglesia del Señor.

Entre las nacidas de nuevo teníamos una hermosa jovencita de Dinamarca (que , obviamente, será una misionera del reino de Dios entre los daneses)
No hay comentarios:
Publicar un comentario